· Existe una fragmentación pronunciada de los sistemas de salud en el país.
· Obtuvo la puntuación más alta en prevención y diagnóstico.
El cáncer es un problema relevante en México y en América Latina. En el país, es la tercera causa de muerte, y en 2015 fue responsable de más de 79 mil fallecimientos. The Economist Intelligence Unit con el patrocinio de Roche Latinoamérica, realizó un estudio en 12 países de América Latina que mostró interesantes hallazgos sobre el control del cáncer la región.
La investigación titulada “Control del cáncer, acceso y desigualdad en América Latina: una historia de luces y sombras” comparó ciertos parámetros que permiten comprender cómo se desempeña cada país en el control integral del cáncer, desde la prevención y la detección temprana hasta el tratamiento y los cuidados paliativos.
De acuerdo con Irene Mia, directora editorial global de Liderazgo de Reflexión, o Thought Leadership, en la Unidad de Inteligencia de The Economist, “en México se necesita trabajar en la fragmentación de sus sistemas de salud para mejorar la efectividad de las políticas de control del cáncer. El lanzamiento del Programa Nacional para el Control del Cáncer, contribuirá a coordinar tales políticas”.
Los hallazgos del estudio muestran que el país tiene un desempeño modesto en prevención y detección temprana. El Seguro Popular; los programas para enfermedades no transmisibles y cáncer de la mujer; el impuesto a las bebidas azucaradas; las iniciativas nacionales para screening (tamizaje y detección temprana) de cáncer de mama y de cuello de útero y otras medidas, son medidas que apuntan a un control del cáncer eficaz.
En su explicación del estudio, Irene Mia añadió que “existen ciertos factores que pueden modificarse para mejorar el control del cáncer. Uno de ellos es la información que se recolecta sobre tumores en el país. Estos datos se vuelcan en registros poblacionales, que son la materia prima para diseñar y evaluar políticas”.
Según la investigación de The Economist, México tiene buenos datos sobre mortalidad, pero carece de Registros de Cáncer de Base Poblacional. En ese sentido, ya se ha producido un avance, ya que recientemente se aprobó la Ley de Registro Nacional de Cáncer de Base Poblacional. El primer registro se lleva a cabo en la ciudad de Mérida (Yucatán) y se unirán otras, incluyendo: Guadalajara (Jalisco), Puebla (Puebla) y Monterrey (Nuevo León).
Los obstáculos en común con la región fueron: la fragmentación de los sistemas de salud, que en México continúa siendo pronunciada; la fuerte desproporción entre las áreas urbanas y rurales, y entre las zonas ricas y pobres, con recursos concentrados en las ciudades y las zonas prósperas; y la disparidad tanto en incidencia y mortalidad como en control del cáncer.
En lo que respecta al gasto en salud, el estudio se muestra que, en México, la inversión del Producto Interno Bruto (PIB) en gasto público en salud fue de 3.3% en 2014, por debajo del promedio regional de 4.6%, y lejos de la que realizan los países de ingresos altos, cuya media es de 7.42%.
Para elaborar el estudio se ocupó una técnica conocida como benchmarking, la cual permitió elaborar una Tabla de Puntuación de Control del Cáncer en América Latina (LACCS, por sus siglas en inglés), que compara el desempeño de los países participantes. A continuación enlistamos los hallazgos de acceso identificadas por LACCS en México:
Planificación
En la actualidad tiene un plan enfermedades no transmisibles (NCD, por sus siglas en inglés) y para cáncer en la mujer.
Registros epidemiológicos
¨ México es el único de los 12 países estudiados que cuenta con datos de mortalidad de alta calidad, según el IARC.
¨ Sin embargo, sus registros de base hospitalaria cubren apenas 7,1% de la población.
Prevención y detección temprana
¨ México obtuvo la puntuación más alta en este dominio.
¨ Es uno de los dos países que aplican un impuesto a las bebidas azucaradas, para prevenir la diabetes y la obesidad.
¨ Cuenta con programas de detección temprana para cáncer de mama, y cáncer de cuello de útero (PAP).
¨ Sin embargo, hay déficits en el tamizaje: las mamografías cubren a menos del 20% de la población objetivo.
Presupuesto y recursos
¨ El financiamiento disponible está por debajo del promedio de los países estudiados. La inversión del PBI en salud pública es de 3,26%, vs. el promedio de 4,6% en los 12 países estudiados, y 7,42% en los países de ingresos altos en el mundo.
¨ Los recursos humanos de oncología son escasos y están concentrados en las grandes urbes.
¨ El equipamiento de radioterapia cubre a apenas 70% de la población, por debajo del promedio de 74% del estudio.
¨ En disponibilidad de medicamentos, México obtuvo un score de 3, con bajo nivel de aprobación de terapias innovadoras.
Ineficiencias y desigualdades
¨ Existe una gran fragmentación. La atención de salud en México se proporciona a través de un conglomerado de subsistemas desarticulados entre sí. Cada subsistema ofrece diferentes niveles de atención, a precios distintos, con diferentes resultados
¨ Avanza hacia la cobertura universal de salud, pero, pese al Seguro Popular, aproximadamente 8% de la población no tiene cobertura
¨ Las zonas rurales tienen menor acceso a tamizaje de cáncer, al diagnóstico y a la óptima atención médica. Igualmente, la infraestructura para el tratamiento se concentra en las grandes ciudades